
Cuando mi mamá se casó, estaba muy enamorada de mi papá. Pero se casó con otro. Incluso hay una foto de esas en la q los novios pasan por todas las mesas, de mi mamá con Edu, en la mesa en donde estaba su enamorado, mi padre, su panza. Ella, locamente enamorada, dejó todo a los 6 meses y se fue a encararlo. Pero como no existía el divorcio, no podían casarse, tenían que ser novios. Y hoy por hoy, lo siguen siendo. Son novios, conviven, curten, tienen hijos...ningueim problema. Este año hace 30 años que se metieron y piensan casarse. Puede llegar a ser lo más raro de esta vida, ver a mi mamá de blanco o a mi hermana gritando "que vivan los novios".
Hoy pensaba cosas: no quiero terminar con un Edu, y sé que lo llevo en la sangre. No quiero tardar tanto siempre para jugarme por
esos hombres de la vida. Quiero
un vestido y un amor, una fiesta en la playa, la coronita, todas las forradas del mundo, pero que nunca nos alcance la seriedad. Que noviemos for ever. O no, pero que mientras dure, me rinda y no me salgan úlseras. Y que cuando venga, me conozca en equilibrio, si algún día lo encuentro. Hasta tanto sigo leyendo la teoría de Nash a ver si puedo hacer algo parecido con mi vida
es igual a vos.